El Ministerio de Emergencias de Rusia ha actualizado la cifra de fallecidos en el ataque terrorista ocurrido el pasado viernes en la sala de conciertos Crocus City Hall, en Moscú, a un total de 143 personas. Estos trágicos decesos fueron causados por heridas de bala y asfixia debido al humo generado por el incendio provocado durante el ataque, según han confirmado las autoridades rusas.
La lista de fallecidos, verificada por el Ministerio de Sanidad de Rusia, se basa en los resultados de las investigaciones forenses realizadas. Además, el Servicio Federal de Seguridad (FSB) ha anunciado la detención de once personas en relación con el atentado. Entre los detenidos se encuentran cuatro terroristas que participaron activamente en el ataque.
El director del FSB, Alexandr Bórtnikov, informó al presidente ruso, Vladímir Putin, sobre la detención de los sospechosos, quienes fueron capturados en una carretera en la región de Briansk, fronteriza con Ucrania, donde presuntamente intentaban escapar. Aunque Rusia ha reconocido que el atentado fue perpetrado por islamistas radicales, continúa investigando posibles conexiones con Ucrania.