- El costo de un comercial de 30 segundos aumentó un 88 % en la última década.
- La NFL generó 600 millones de dólares en ingresos publicitarios en la edición pasada.
- Grandes marcas como PepsiCo y Anheuser-Busch ya aseguraron su presencia en el evento.
El Super Bowl 59, que se celebrará el 9 de febrero en Nueva Orleans entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, marcará un nuevo récord en la publicidad televisiva. Fox Sports confirmó que el costo de un anuncio de 30 segundos durante la transmisión ha alcanzado los 8 millones de dólares, superando la cifra del año pasado y reflejando un incremento del 88 % en la última década.
El crecimiento constante del valor publicitario
El costo de los comerciales en el Super Bowl ha mostrado una tendencia al alza desde 2015, cuando un espacio de 30 segundos costaba 4.25 millones de dólares. En los siguientes años, el precio continuó aumentando hasta alcanzar los 5.4 millones en 2017. Aunque hubo ligeros descensos en 2018 y 2019, la cifra volvió a subir en 2020 con 5.6 millones.
Incluso la pandemia de COVID-19 no detuvo este crecimiento. En 2021, el precio se mantuvo en 5.6 millones, pero en los años posteriores la cifra siguió subiendo: 6.5 millones en 2022, 6.8 millones en 2023 y 7 millones en 2024. Ahora, en 2025, ha alcanzado un máximo histórico de 8 millones.
Además, los anuncios previos y posteriores al partido también han aumentado significativamente. Un comercial antes del juego puede costar hasta 4.5 millones de dólares, mientras que después del partido el precio alcanza los 4 millones.
El impacto del Super Bowl en la publicidad
El alto costo de la publicidad en el Super Bowl se debe a su masiva audiencia. La NFL reportó que la edición pasada rompió récords con 123 millones de espectadores en Estados Unidos, mientras que a nivel global el evento alcanzó los 62,500 millones de vistas.
Empresas como PepsiCo, Anheuser-Busch y Stellantis ya aseguraron su espacio publicitario para la transmisión de este año. Sin embargo, algunas marcas como State Farm se retiraron, lo que permitió a Fox revender los anuncios a precios aún más altos.
La NFL registró un ingreso récord de 600 millones de dólares por publicidad en la edición anterior, consolidando al Super Bowl como el evento deportivo más lucrativo para los anunciantes.