Aunque se espera cierta flexibilidad en las políticas de los bancos centrales, los economistas del FMI advierten que las tasas reales permanecerán volátiles debido a la persistente lucha contra la inflación.
En un blog titulado “Riesgos fiscales y financieros en un mundo endeudado con bajo crecimiento”, los expertos del FMI explican que el aumento de las tasas de interés probablemente reflejará una política fiscal expansiva y preocupaciones fiscales a largo plazo.
La política fiscal expansiva, al aumentar el endeudamiento del sector público, puede estimular el gasto interno y, en última instancia, presionar al alza los precios. Esta dinámica podría generar un ciclo negativo, donde los inversores cuestionen la sostenibilidad de la deuda a largo plazo y exijan mayores rendimientos.
Por lo tanto, a pesar de una posible disminución en las tasas nominales, es probable que persista un entorno de financiamiento con costos más elevados que en décadas pasadas.
El FMI hace hincapié en la necesidad de una acción fiscal decisiva y creíble para llevar gradualmente la deuda mundial a niveles más sostenibles, destacando la importancia de aumentar los ingresos y fomentar el crecimiento económico.
Este análisis surge a pocos días del inicio de las Reuniones de Primavera del FMI y el Banco Mundial, que tendrán lugar de manera presencial en las sedes de ambas instituciones.