- Hizbulá condiciona una posible tregua con Israel a que cese la “agresión” contra el Líbano y se respete su soberanía.
- Naim Qasem, líder de la organización, asegura que seguirán luchando mientras se mantienen las negociaciones.
- Los avances en las negociaciones de tregua enfrentan obstáculos, como las condiciones impuestas por Israel y el control estadounidense sobre el mecanismo de supervisión.
Hizbulá ha puesto como condición para una tregua con Israel que este país detenga la “agresión” contra el Líbano y respete su soberanía. Naim Qasem, nuevo secretario general de la organización chií, explicó que, aunque se están llevando a cabo negociaciones diplomáticas, Hizbulá continuará sus operaciones militares en el campo de batalla mientras no se llegue a un acuerdo definitivo.
Qasem, quien asumió el cargo recientemente tras el asesinato de su predecesor, Hasán Nasrala, destacó que la organización no permitirá que Israel imponga sus condiciones mediante un acuerdo. “Israel no puede lograr lo que no ha conseguido en el campo de batalla a través de una negociación”, declaró.
Las conversaciones para una tregua, mediadas por Estados Unidos, avanzan, aunque enfrentan obstáculos, como la propuesta israelí de tener “libertad de movimiento” en el Líbano si se ve amenazado por Hizbulá, lo que es inaceptable para el Líbano. También se discute la creación de un mecanismo para supervisar el cumplimiento de la resolución 1701 de la ONU, que pone fin a la guerra de 2006, bajo la dirección de Estados Unidos.
Qasem aseguró que las negociaciones dependerán de la disposición de Israel y de la postura de su primer ministro, Benjamín Netanyahu. “La resistencia libanesa tiene la capacidad de continuar mucho tiempo más”, añadió.
Desde el inicio de las incursiones israelíes en Líbano, Hizbulá ha causado numerosas bajas en las filas del ejército israelí. Qasem reiteró que la milicia de Hizbulá continuará luchando en el terreno, sin importar las consecuencias.