- La Cumbre Iberoamericana de Cuenca 2024 marca un hito con la falta de líderes latinoamericanos, excepto el presidente de Ecuador.
- Las delegaciones enfrentan tensiones sobre temas como género, sostenibilidad y el bloqueo de EE.UU. a Cuba.
- El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, destacó la importancia de la cooperación y la empleabilidad juvenil ante los desafíos globales.
La XXIX Cumbre Iberoamericana comenzó este viernes en la ciudad ecuatoriana de Cuenca, en un contexto histórico debido a la notable ausencia de presidentes latinoamericanos, salvo el anfitrión, Daniel Noboa. Este evento, que tradicionalmente reúne a los máximos líderes de Iberoamérica, registró una baja participación, con la presencia de solo tres representantes de otros países: el rey Felipe VI de España, el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, y el jefe de Gobierno de Andorra, Xavier Espot. Las sillas de México, Nicaragua y Venezuela quedaron vacías por las tensiones diplomáticas con Ecuador.
A pesar de la escasa presencia de jefes de Estado, las delegaciones diplomáticas continúan con las negociaciones para lograr una declaración final que aborde temas clave como la cooperación regional y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Sin embargo, las conversaciones han sido complejas debido a la oposición de algunos países a incluir cuestiones relacionadas con género y sostenibilidad en el documento final. Además, Cuba ha manifestado su desacuerdo con la propuesta de Argentina de excluir la condena al bloqueo de EE.UU. en la declaración.
Tensiones y desacuerdos marcan las negociaciones.
En la inauguración de la Cumbre, el secretario general de la Secretaría Iberoamericana, Andrés Allamand, resaltó la necesidad de fortalecer el multilateralismo y la cooperación en un mundo cada vez más fragmentado y polarizado. Allamand enfatizó que, a pesar de los conflictos y divisiones, el encuentro iberoamericano sigue siendo un espacio crucial para alcanzar consensos en temas de interés común y promover la unidad en la región. “Este no es el tiempo de la resignación, sino de la ambición”, agregó, subrayando la importancia de avanzar en políticas que beneficien a las personas.
El presidente Noboa, por su parte, destacó los esfuerzos de su gobierno para garantizar el éxito de esta Cumbre, a pesar de las dificultades internas y externas que enfrenta Ecuador. En su intervención, llamó a la cooperación para resolver desafíos como el crimen organizado, el cambio climático y la inclusión laboral de los jóvenes. Noboa también destacó el papel fundamental del sector privado y la educación para crear un futuro más inclusivo y sostenible. Al finalizar la jornada, se aprobó una iniciativa empresarial destinada a mejorar la empleabilidad juvenil en Iberoamérica.