- Ángel Gallegos y Giselle Espinoza, jóvenes votantes, buscan hacer sentir la voz de sus familias indocumentadas en las elecciones de 2024.
- La participación juvenil se presenta como una fuerza clave para visibilizar las preocupaciones de la comunidad migrante.
- Más de 22 millones de personas en EE.UU. viven en hogares con miembros indocumentados, lo que destaca la relevancia de este voto.
Ángel Gallegos, un joven de 19 años originario de Los Ángeles, se siente impulsado a votar no solo por su propio futuro, sino por el de su comunidad de inmigrantes indocumentados. Al votar por primera vez, él expresa que lo hace “por su familia y por aquellos que no pueden alzar la voz”. Gallegos, quien está estudiando Ingeniería, participa en el voto anticipado organizado por la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (Chirla), con la firme intención de abogar por sus padres y otros miembros de su comunidad que enfrentan la falta de estatus legal y las políticas de inmigración restrictivas.
De manera similar, Giselle Espinoza, de 20 años, también se alza como primera votante en su familia, con la esperanza de que su sufragio represente a sus padres indocumentados y a sus tres hermanos menores de edad, quienes no pueden votar. Espinoza, estudiante de Biología y trabajadora en una escuela, destaca que su voto busca hacer frente a las posibles deportaciones y las políticas migratorias de figuras como Donald Trump. La joven subraya que su decisión es también un mensaje de esperanza y lucha por los derechos de su familia y de otros jóvenes en situaciones similares.
Jóvenes votantes defienden a sus familias indocumentadas en las elecciones.
Estos jóvenes votantes se insertan en una creciente tendencia de participación cívica de los hijos de inmigrantes, quienes, aunque nacidos en EE.UU. y con ciudadanía, sienten la responsabilidad de luchar por el bienestar de sus familias y comunidades. Datos del Centro Pew muestran que más de 22 millones de personas en el país viven en hogares con miembros indocumentados, un dato que pone en perspectiva la relevancia del voto de estos jóvenes. En estados como California, Nevada y Texas, las familias de estatus mixto juegan un papel crucial en las elecciones, lo que hace que su participación electoral sea clave para los resultados.
La campaña “Why I Vote”, liderada por Chirla, ha sido fundamental para fomentar la participación de los jóvenes latinos. Gallegos, al votar, lleva con orgullo un botón con el mensaje “For my family, rights and life”, diseñado por estudiantes en apoyo a esta campaña. Para él, este acto simbólico representa un grito de unidad y un llamado a otros jóvenes a involucrarse activamente en la política, no solo por ellos mismos, sino por todas las personas que viven en EE.UU. y que, por diversas razones, aún no tienen voz en el proceso electoral.