- La Asamblea General de la ONU vota con 187 a favor y solo 2 en contra.
- Estados Unidos e Israel se oponen, mientras Moldavia se abstiene.
- El canciller cubano califica las sanciones de inhumanas y destructivas.
Este miércoles, la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución que pide poner fin al embargo impuesto por Estados Unidos a Cuba. La votación fue abrumadora: 187 votos a favor, 2 en contra (de EE. UU. e Israel) y 1 abstención (Moldavia). Este embargo lleva 62 años y ha perjudicado gravemente la economía cubana.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, criticó al presidente Joe Biden por mantener las mismas sanciones que aplicó Donald Trump, a pesar de sus efectos devastadores.
Rodríguez Parrilla calificó el bloqueo como “inhumano” y como parte de una “guerra económica extrema” contra Cuba, que busca intimidar a otros países que defienden su soberanía. Dijo: “Let Cuba live in peace” (Dejen a Cuba vivir en paz), mientras la delegación de EE. UU. permanecía en silencio.
Irán también se pronunció en contra del bloqueo, afirmando que representa una amenaza al multilateralismo y que las sanciones son un método para lograr intereses nacionales que ponen en peligro la paz mundial.
El apoyo a Cuba en esta votación fue similar al del año pasado. Este año, el informe de la Secretaría General de la ONU incluyó respuestas de más de 180 países y 35 organizaciones internacionales, como Unicef y la OMS, que también condenan el bloqueo.
Las sanciones de EE. UU. comenzaron en 1959, pero se intensificaron en 1962 con la administración de John F. Kennedy. Desde entonces, han crecido en varias ocasiones, como con la ley Helms-Burton en 1996 y las medidas de Trump. El gobierno de Biden ha mantenido la mayoría de estas sanciones.
La población cubana enfrenta escasez de alimentos, medicinas y combustible, apagones diarios, inflación y deterioro en la educación y la salud. La Habana estima que el costo del bloqueo entre marzo de 2023 y febrero de 2024 asciende a 5.056,8 millones de dólares.