Uso de un dispositivo controvertido en la F1: Red Bull admite su existencia, generando un ambiente de controversia en la Fórmula 1 mientras la FIA refuerza regulaciones para asegurar la igualdad entre los equipos.
- La escudería sostiene que el mecanismo de ajuste no se activa durante las carreras.
- La FIA refuerza regulaciones para prevenir manipulaciones en la altura del chasis.
- Las dudas sobre Red Bull aumentan a días del Gran Premio de Estados Unidos.
Uso de un dispositivo controvertido en la F1: la situación actual
Red Bull Racing ha confirmado la existencia de un dispositivo que permite ajustar la altura de su quilla delantera. No obstante, la escudería argumenta que este mecanismo no puede ser utilizado cuando el coche está en pista. Las preocupaciones sobre el posible uso indebido de esta tecnología surgieron justo antes del Gran Premio de Estados Unidos, tras el anuncio de la FIA de medidas más estrictas en la materia.
La FIA ha decidido implementar nuevos procedimientos debido a las alertas recibidas de varios equipos que temen que las normas del parque cerrado se puedan explotar. Esto podría permitir a un equipo rival realizar ajustes en la altura del vehículo entre la clasificación y la carrera. Para mitigar este riesgo, se ha propuesto la colocación de sellos en los dispositivos de ajuste, garantizando que no puedan ser manipulados durante el evento.
Atención en torno al uso de un dispositivo controvertido en la F1
Durante el fin de semana en Austin, la atención se centró en Red Bull, donde los equipos discutieron ampliamente la situación. Las regulaciones de la FIA buscan asegurar la equidad en la competencia y evitar que un equipo se beneficie de ajustes no autorizados. En este marco, el equipo liderado por Christian Horner ha enfatizado su compromiso con las normativas, aunque la controversia sigue vigente.
El dispositivo ha reavivado el debate sobre la legalidad de ciertas innovaciones en la Fórmula 1. A medida que avanza la temporada, todos los ojos estarán puestos en Red Bull y sus rivales para observar cómo se adaptan a las nuevas regulaciones y si estas serán efectivas para mantener un juego limpio.