Este 1 de octubre, Claudia Sheinbaum hizo historia al convertirse en la primera mujer presidenta de México. Durante una ceremonia en el Zócalo de la Ciudad de México, recibió el bastón de mando, un objeto que representa el poder político y espiritual, uniendo al gobierno con las comunidades indígenas y afromexicanas.
Este acto marca el comienzo de su mandato, que se extenderá hasta 2030, y reafirma su compromiso con los principios de la cuarta transformación, impulsados por su predecesor, Andrés Manuel López Obrador.
En la ceremonia se realizaron rituales ancestrales, como una limpieza y purificación de la presidenta. “Estamos todos los pueblos unidos para seguir trabajando con usted”, afirmó una guía espiritual. Al recibir el bastón, fue respaldada por 70 pueblos indígenas y afromexicanos.
Significado del bastón de mando
El bastón de mando es un símbolo de poder y responsabilidad. Recuerda a la presidenta que debe gobernar al servicio del pueblo, destacando la importancia de la justicia y la equidad.
Ceremonia en el Zócalo
El evento tuvo lugar en el corazón político y cultural de México. Claudia Sheinbaum, rodeada de mujeres indígenas y afromexicanas, recibió este símbolo de poder, mostrando su compromiso con las comunidades originarias.
Continuidad de la cuarta transformación
Sheinbaum enfrenta el reto de continuar el proyecto de la cuarta transformación y abordar las desigualdades sociales. López Obrador destacó el bastón como un legado de los pueblos más pobres, fundamental para asegurar políticas de justicia social en su gobierno.
Un gobierno para el pueblo
Con la entrega del bastón de mando, Claudia Sheinbaum inicia su responsabilidad de liderar a México con justicia y equidad. Este momento es histórico no solo por ser la primera mujer en la presidencia, sino también por el simbolismo que implica el bastón de mando.