- Trump y Harris se preparan para el debate presidencial, cada uno con una estrategia muy distinta.
- Trump minimiza la importancia del debate mientras Harris se entrena en un entorno simulado.
- Las reglas del debate incluyen micrófonos silenciados y estrictas condiciones previas.
Los candidatos a la presidencia, Donald Trump y Kamala Harris, están preparando de manera muy diferente el importante debate que se llevará a cabo el próximo martes en los estudios de ABC en Filadelfia. Este debate podría ser el único cara a cara de la campaña electoral, dado el ajuste de los sondeos y su potencial impacto en los votantes indecisos.
Donald Trump ha abordado la preparación para el debate con su estilo característico. Durante un mitin en Wisconsin, el expresidente minimizó la importancia del evento y bromeó sobre su capacidad para “destruir” a Harris. Trump ha criticado la preparación de Harris, sugiriendo que ha estado “encerrada” ensayando para el debate. Afirmó que no necesita entrenamiento adicional, ya que, según él, ha estado “preparado toda su vida” para enfrentar el debate, confiando en su profundo conocimiento de los problemas que enfrenta el país.
Estrategia de Harris
Por otro lado, Kamala Harris ha adoptado una estrategia más meticulosa. Según el New York Times, Harris ha estado ensayando en un entorno simulado en un hotel de Pittsburgh, utilizando un “doble” de Trump para practicar sus respuestas. Esta preparación intensiva contrasta con el enfoque más improvisado de Trump. Harris ha estado practicando para manejar las preguntas difíciles y posibles ataques que Trump pueda lanzar durante el debate.
Las reglas del debate han sido rigurosamente negociadas y seguirán el formato del debate Biden-Trump. Esto incluye la ausencia de público, tiempos estrictos para las intervenciones, y la prohibición de contacto con los equipos de campaña durante las pausas. Uno de los puntos más polémicos ha sido el tema de los micrófonos silenciados. El equipo de Harris ha intentado que los micrófonos permanezcan abiertos para permitir un intercambio más fluido, mientras que Trump ha criticado a ABC, alegando que la cadena podría estar favoreciendo a Harris.