- Más de 1,100 jueces y magistrados piden a la CIDH intervenir contra la reforma judicial.
- Acusan que la reforma busca concentrar el poder y destruir principios democráticos.
- Solicitan una revisión completa del proceso y observación en México.
Más de 1,100 jueces y magistrados, activos y jubilados del Poder Judicial de la Federación (PJF), han solicitado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) una intervención urgente para detener la “Reforma Judicial” que se discutirá hoy en la Cámara de Diputados. Aseguran que esta reforma podría ser un “golpe de Estado” disfrazado de democratización y que pretende concentrar el poder, eliminando principios fundamentales de la democracia.
En una conferencia en la sede del PJF en la alcaldía Álvaro Obregón, el magistrado Juan José Olvera López criticó el proceso, llamándolo producto de “diálogos simulados e inútiles”. Destacó que la reforma no busca mejorar la justicia, sino consolidar el poder y eliminar a jueces que han frenado abusos de poder.
Los magistrados pidieron a la CIDH que solicite al gobierno mexicano que suspenda temporalmente la reforma para permitir una revisión completa de su conformidad con los estándares internacionales de derechos humanos. También exigen que el Estado mexicano proporcione toda la información sobre la reforma, especialmente sobre la sustitución de jueces por otros elegidos popularmente.
Además, piden que México sea incluido en el informe anual de la CIDH, junto con países como Cuba y Venezuela, para un mayor escrutinio sobre sus compromisos internacionales en derechos humanos. Solicitan también una visita de la CIDH para evaluar la situación y elaborar un informe sobre la democracia y la independencia judicial en el país.