- 60 muertos y decenas de desaparecidos tras el derrumbe de la presa de Jor Arbaat.
- Destrucción de aldeas cercanas y situación crítica en la región.
- Falta de mantenimiento y fuertes lluvias contribuyeron al desastre.
El colapso de la presa de Jor Arbaat en el este de Sudán ha dejado al menos 60 muertos y decenas de personas desaparecidas. La presa, construida en 2003 y sin mantenimiento en los últimos tres años, albergaba 25 millones de metros cúbicos de agua, según la Media Luna Roja Sudanesa.
La falla estructural ha arrasado varias aldeas cercanas, complicando los esfuerzos de rescate debido a la inaccesibilidad de las zonas afectadas. La situación es descrita como “catastrófica” por autoridades locales, con al menos cinco pueblos completamente devastados.
Nayi Ezzeldin, consejero del gobernador del estado de Mar Rojo, indicó que se necesitan helicópteros para evacuar a los afectados, muchos de los cuales han subido a montañas cercanas para escapar de las inundaciones y enfrentan riesgos adicionales como mordeduras de serpientes y picaduras de escorpiones.
El colapso se debe tanto a la falta de mantenimiento como a las intensas lluvias recientes, que también han causado la muerte de al menos 114 personas en el país. Las inundaciones han afectado a unas 317,000 personas, desplazado a 118,000 y destruido cerca de 27,000 hogares, con daños en más de 31,000 viviendas en varios estados.
Además, Sudán enfrenta un brote de cólera con más de 500 casos reportados, y un incremento de enfermedades como malaria y ceguera nocturna, agravando la crisis en un sistema de salud ya debilitado por la guerra.