En las últimas 48 horas, al menos 69 palestinos han muerto en Gaza a causa de los ataques de Israel. Esto eleva el total de víctimas desde el inicio de la guerra en octubre a 40.074, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.
Se estima que alrededor de 10.000 cuerpos aún están entre los escombros, y más de 92.000 personas han resultado heridas desde que comenzó el conflicto.
El ataque más mortífero ocurrió en Zawayda, en el centro de Gaza, donde un bombardeo israelí mató a 15 miembros de la familia Al Ajla. Hamás condenó el ataque, describiéndolo como una “masacre” que borró a toda una familia del registro civil.
Zawayda era una de las zonas a las que Israel había ordenado evacuar antes de intensificar su ofensiva terrestre en Gaza. Además, un ataque aéreo israelí en el campamento de refugiados de Nuseirat mató a seis personas, incluidos dos niños.
Desde la madrugada, los bombardeos israelíes han causado 21 muertes en Gaza. Las evacuaciones en el centro de Gaza han precedido a bombardeos intensos en áreas como Deir al Balah y el campamento de refugiados de Maghazi.
Las órdenes de evacuación suelen ser seguidas por bombardeos intensos. Esto ya ocurrió en Jan Yunis, donde una ofensiva en julio dejó al menos 300 muertos. Ahora, Israel sigue combatiendo en la ciudad.
El Ejército israelí ha anunciado que tomará medidas enérgicas contra los lanzamientos de cohetes desde Gaza. Las evacuaciones recientes y la reducción de la “zona humanitaria” han generado hacinamiento y falta de servicios básicos para cientos de miles de desplazados.
El número total de fallecidos en Gaza desde el inicio de los ataques israelíes ha superado los 40.000, representando alrededor del 2% de la población, mientras que más de 92.000 personas han resultado heridas.