- López Obrador justifica la solicitud de salvoconducto para Glas como parte de la tradición de México de proteger a perseguidos políticos.
- México pidió a Ecuador un salvoconducto para excarcelar y trasladar a Glas a un tercer país debido a su estado de salud.
- El presidente cuestiona la tardanza de la Corte Internacional de Justicia en resolver la demanda contra Ecuador por la violación de la sede diplomática.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, defendió el pedido de salvoconducto para Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador, destacando que esta solicitud se alinea con la tradición mexicana de ofrecer asilo a perseguidos políticos. López Obrador subrayó que proteger a personas en riesgo de persecución política ha sido una constante en la política exterior de México.
La Cancillería mexicana solicitó a Ecuador el lunes un salvoconducto para que Glas, quien se encuentra en un estado de salud crítico, pueda ser trasladado a un tercer país para su protección. Esta medida busca asegurar su bienestar y su seguridad, conforme a la Convención de Caracas.
El presidente mexicano también expresó su frustración por la demora en la resolución de la demanda presentada por México ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), relacionada con la incursión de la Policía ecuatoriana en la Embajada mexicana en Quito. López Obrador criticó la falta de acción por parte de la CIJ y la ONU, calificando a estos organismos de ineficaces.
Actualmente, Jorge Glas está recluido en La Roca, una cárcel de máxima seguridad en Guayaquil, Ecuador, cumpliendo una condena de ocho años por corrupción. La solicitud de México responde a su grave estado de salud y la necesidad de garantizar su protección en un entorno seguro.