Más de 40 migrantes murieron y varios resultaron heridos cuando su barco se incendió cerca de la costa de Cabo Haitiano, en el norte de Haití. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dio a conocer el incidente este viernes.
El barco, que transportaba a más de 80 personas, zarpó el miércoles desde Labadee con destino a las Islas Turcas y Caicos, situadas a unos 250 kilómetros al norte.
La Guardia Costera de Haití rescató a 41 personas del barco, de las cuales 11 fueron hospitalizadas.
Grégoire Goodstein, de la OIM, comentó: “Este trágico evento muestra los peligros de migrar por rutas irregulares y la urgente necesidad de opciones migratorias seguras”.
Añadió que la situación en Haití es crítica: “La violencia reciente ha forzado a muchos haitianos a tomar decisiones desesperadas”.
Haití, el país más pobre de América, enfrenta la violencia de bandas que controlan gran parte de la capital, Puerto Príncipe, y las principales carreteras.
Desde febrero, estas bandas se han unido para desafiar al antiguo primer ministro Ariel Henry, atacando cárceles, comisarías, edificios gubernamentales y barrios residenciales.
Con la llegada de nuevas autoridades, el país intenta recuperar la seguridad y enfrentar la crisis humanitaria.
La OIM también destaca que la Guardia Costera ha visto un aumento en los intentos de migrar por barco. Este año, más de 86.000 migrantes han sido devueltos a Haití por los países vecinos, lo que agrava la preocupación en medio de la crisis.
El nuevo gobierno haitiano ha anunciado que empezará operaciones contra las pandillas con el apoyo de 400 policías de Kenia, quienes llegaron a Puerto Príncipe como parte de una misión internacional respaldada por la ONU.