- China niega categóricamente las acusaciones de gestionar bases de espionaje en Cuba.
- La Cancillería china enfatizó la cooperación transparente y legítima con Cuba.
- Críticas a Estados Unidos por su historial de interferencias en Cuba y llamados a levantar sanciones.
China ha refutado enérgicamente las acusaciones de que opera bases de espionaje en Cuba, describiendo tales afirmaciones como un “cuento”, según declaraciones de la portavoz de la Cancillería china, Mao Ning. En una conferencia de prensa, Mao destacó la relación de cooperación entre China y Cuba como un modelo de ayuda mutua entre naciones en desarrollo y afirmó que las acusaciones del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) carecen de fundamento.
La portavoz añadió que la cooperación entre ambos países es transparente y legítima, sin ninguna intención de perjudicar a terceros. Además, criticó las prolongadas interferencias de Estados Unidos en los asuntos internos de Cuba, incluyendo sanciones y un bloqueo que ha afectado severamente al pueblo cubano durante más de seis décadas.
El informe del CSIS señala la supuesta expansión de bases de espionaje vinculadas a China en Cuba, específicamente estaciones de escucha electrónica cerca de la base naval estadounidense en Guantánamo. Según el informe, estas instalaciones podrían estar destinadas a captar comunicaciones electrónicas confidenciales de bases militares estadounidenses, instalaciones de lanzamiento espacial y embarcaciones militares y comerciales en el sureste de Estados Unidos.
En respuesta a estas acusaciones, el viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Carlos Fernández de Cossío, calificó la información de una “campaña de intimidación” y negó rotundamente la existencia de bases militares chinas en Cuba a través de sus redes sociales.