- Federación Internacional de Periodistas y la Federación Europea de Periodistas condenan la decisión de Rusia.
- La medida afecta a medios de 17 países europeos, incluyendo importantes periódicos y canales de televisión.
- Las asociaciones piden que se respete el derecho de acceso a la información y la libertad de prensa en toda Europa.
Condena internacional y llamado a la reversión
La Federación Internacional de Periodistas (FIP) y la Federación Europea de Periodistas (FEP) han emitido una declaración conjunta en la que condenan firmemente la decisión de Rusia de vetar el acceso a 81 medios de comunicación europeos, entre los cuales se encuentra la Agencia EFE. Este veto, según las asociaciones, constituye una represalia injusta contra las sanciones recientes impuestas por la Unión Europea debido a la situación en Ucrania, y representa un grave ataque a la libertad de prensa.
En su comunicado, las asociaciones instan al Kremlin a revertir esta medida y asegurar que los ciudadanos tengan acceso libre a la información proveniente de toda Europa. “La libertad de prensa no debe ser una víctima colateral en este conflicto”, subrayaron.
La decisión de Rusia también ha generado reacciones a nivel europeo, siendo condenada recientemente en una declaración adoptada por los países de la Unión Europea. Sin embargo, el gobierno de Hungría, liderado por Viktor Orbán, se ha desmarcado de esta posición. Entre los medios españoles afectados además de la Agencia EFE se encuentran El País, El Mundo y Televisión Española.
Impacto en los medios europeos
Entre los 81 medios afectados se encuentran destacadas publicaciones como el diario alemán “Die Zeit” y la revista “Der Spiegel”, los italianos “La Stampa” y “La Repubblica”, el portugués “Publico”, los franceses “Le Monde” y “Libération”, así como la revista holandesa “Algemeen Dagblad”.
Además de los periódicos, la medida también afecta a canales de televisión como la italiana RAI, los franceses LC1 y Arte, la irlandesa RTE, la portuguesa RTP Internacional, la holandesa Nos y la austriaca ORF, junto con la emisora Radio France y las agencias Agence France-Press y Agence Europe.
Moscú ha justificado esta acción como respuesta a las restricciones impuestas el pasado 17 de mayo por el Consejo de la Unión Europea contra tres medios rusos: la Agencia RIA Nóvosti y los diarios Izvestia y Rossískaya Gazeta.