El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), desestimó este martes las proyecciones de crecimiento económico realizadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las políticas económicas promovidas por el Banco Mundial (BM). Afirmó que México mantendrá una política económica independiente, asegurando que “el humanismo mexicano con economía mundial funciona mejor”.
Durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, el mandatario criticó la reciente proyección del FMI que indica que en los próximos años México tendrá una tasa de crecimiento menor que Argentina, bajo el liderazgo del ultraderechista Javier Milei.
Según el FMI, se espera que la economía mexicana crezca a un ritmo de 1.8% anual en el periodo 2025-2027, mientras que la argentina alcanzaría un 4.5%.
“El FMI declaró que Argentina crecerá más que México, cuando el Fondo, con todo respeto, fue responsable del desastre económico en Argentina. Y ahora, como si nada, se erigen como árbitros que dictan lo que sucederá en el futuro”, manifestó López Obrador.
Añadió que, en contraste con el proyecto neoliberal del FMI y el BM, México propone el “humanismo mexicano con economía moral”, una alternativa que, según él, ha demostrado ser más efectiva que las políticas impuestas por estos organismos durante más de tres décadas.
El presidente subrayó la importancia de que México cuide sus políticas económicas de las recomendaciones de organismos financieros internacionales, afirmando que anteriormente el país dependía de recetas extranjeras en lugar de desarrollar planes propios.
“Tenemos relaciones con el Banco Mundial y el FMI, pero nuestra política económica es autónoma y se decide aquí. Agradecemos sus recomendaciones, pero aplicamos una política económica que se ajusta a nuestra realidad”, agregó.
AMLO también criticó que durante el periodo neoliberal las agendas del FMI y el BM no incluían temas como el combate a la corrupción y la pobreza, ni aumentos salariales o creación de empleos. En cambio, destacó que se enfocaban en la privatización y en mantener congelados los salarios, limitando el fortalecimiento de empresas públicas.