Cuando Rusia invadió Ucrania en 2022, el mundo esperaba que las sanciones internacionales debilitaran su economía. Sin embargo, más de dos años después, la economía rusa está en crecimiento, desafiando las expectativas y manteniendo la guerra en curso.
- A pesar de las sanciones, Rusia ha logrado mantener su economía en crecimiento. Se prevé que su PIB crezca un 3.2% este año, superando a muchas economías avanzadas.
- Las sanciones no han causado escasez significativa en las tiendas rusas, aunque los precios han aumentado y algunos productos han desaparecido.
- La salida de empresas occidentales del mercado ruso no ha detenido completamente la llegada de sus productos, que aún se encuentran disponibles a través de diversas rutas.
- Rusia ha buscado nuevos mercados en Asia y el Sur Global para contrarrestar el impacto de las sanciones occidentales.
- China se ha convertido en un socio crucial para Rusia, siendo su principal proveedor de petróleo y contribuyendo al comercio bilateral récord de $240 mil millones el año pasado.
- El gasto militar ha impulsado el crecimiento económico en Rusia desde el inicio del conflicto en Ucrania.
- Aunque esto ha aumentado los salarios en el sector de defensa, ha desviado fondos de otras áreas, como infraestructura y desarrollo futuro.
- A pesar de su resistencia actual, Rusia enfrenta nuevas amenazas de sanciones secundarias, lo que podría crear problemas financieros adicionales.
- La economía rusa aún no ha superado por completo las sanciones y enfrenta incertidumbre en el futuro cercano.
En resumen, la economía rusa ha demostrado una sorprendente capacidad de adaptación frente a las sanciones internacionales y la presión económica, aunque persisten desafíos significativos para su futuro.