las fuerzas rusas comenzaron la primera fase de unos ejercicios que implican “entrenamiento práctico en la preparación y uso de armas nucleares no estratégicas”, informó el Ministerio de Defensa.
El presidente Vladimir Putin ordenó estos ejercicios a principios de mes, relacionándolos con lo que describe como “declaraciones militantes” de líderes occidentales que, según Moscú, representan amenazas para la seguridad de Rusia.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia citó comentarios del presidente francés, Emmanuel Macron, quien sugirió la posibilidad de enviar tropas europeas para combatir en Ucrania, y del ex primer ministro británico, David Cameron, quien afirmó que Ucrania tiene derecho a usar armas proporcionadas por Londres contra objetivos en Rusia.
Analistas de seguridad interpretan estos ejercicios como una advertencia de Putin para disuadir a Occidente de involucrarse más en el conflicto en Ucrania, donde se han proporcionado armas e inteligencia, pero no tropas.
En la primera fase, se utilizaron misiles Iskander y Kinzhal. El objetivo es asegurar que las unidades y el equipo estén preparados para “el uso de combate de armas nucleares no estratégicas” en respuesta a las amenazas y declaraciones provocativas de funcionarios occidentales.
Respuesta de Ucrania y sus Aliados
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, propuso que los aliados occidentales de Kiev derriben los misiles lanzados por Rusia desde sus propios territorios.
“No hay ningún argumento legal, de seguridad o moral que impida a nuestros socios derribar los misiles rusos sobre Ucrania desde sus territorios”, afirmó Kuleba en una conferencia de prensa junto a su homóloga alemana, Annalena Baerbock.
Kuleba argumentó que derribar misiles no pone en peligro a Rusia ni a sus soldados. “Son trozos de metal que transportan la muerte desde Rusia a Ucrania”. Además, pidió a los aliados que, si no quieren derribarlos, proporcionen a Ucrania los medios necesarios para interceptarlos.
En el frente de guerra, el presidente Volodimir Zelenski informó que el ejército ucraniano está logrando avances “tangibles” en su contraofensiva en la región nororiental de Járkov, lanzada el 10 de mayo.