El presidente Andrés Manuel López Obrador tomó la iniciativa de retirar una de sus conferencias mañanera antes de que el Instituto Nacional Electoral (INE) pudiera intervenir, en respuesta a una queja por expresiones consideradas inapropiadas durante dicha transmisión.
Durante la semana, el Presidente expresó su falta de claridad respecto a la orden del INE, señalando que respaldaba la validación del Tribunal Electoral. Este tribunal obliga a su vocero, Jesús Ramírez, a editar las mañaneras en caso de comentarios que se consideren ilícitos electorales.
En una acción sin precedentes, el gobierno federal retiró la mañanera del 25 de abril, objeto de denuncia por parte de la oposición. Esta denuncia argumentaba que el Presidente había vulnerado sus obligaciones constitucionales de imparcialidad, neutralidad y equidad en la contienda electoral, además de utilizar recursos públicos de manera indebida e intervenir ilícitamente para favorecer a Claudia Sheinbaum.
El proyecto elaborado por la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral del INE concluyó que las declaraciones de López Obrador durante dicha conferencia estaban fuera de los límites permitidos para la difusión de propaganda gubernamental.
A pesar de que se había planteado la medida cautelar de ordenar la edición o eliminación de dicha conferencia, durante la sesión de la Comisión de Quejas y Denuncias se constató que las publicaciones ya habían sido eliminadas, lo que imposibilitaba dictar la medida cautelar.
La Comisión de Quejas y Denuncias declaró este hecho como consumado. Sin embargo, la denuncia por ilícitos electorales, como intervención indebida en el proceso electoral o uso indebido de recursos públicos para beneficiar a la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, será tratada en la Sala Regional Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.