- Joaquín “El Chapo” Guzmán enfrenta limitaciones en las visitas familiares desde su encarcelamiento en ADX Florence.
- La esposa del narcotraficante y sus hijas gemelas no han podido visitarlo desde su condena en 2019.
Desde su traslado a la prisión de máxima seguridad ADX Florence en 2019, Joaquín “El Chapo” Guzmán ha enfrentado restricciones significativas en cuanto a las visitas familiares. Aunque el capo narcotraficante ha buscado que su esposa e hijas puedan visitarlo, las autoridades han mantenido firmes las restricciones.
Las únicas personas autorizadas para visitar a Joaquín “El Chapo” Guzmán en la cárcel son su esposa, Emma Coronel, y sus hijas gemelas, Emali Guadalupe y María Joaquina. Sin embargo, desde su sentencia a cadena perpetua en 2019, estas visitas no han sido posibles.
La situación se torna aún más compleja considerando los vínculos de Emma Coronel con el capo. Durante el juicio contra “El Chapo”, se evidenció su presunta implicación en actividades delictivas, incluida la segunda fuga del narcotraficante.
A pesar de las restricciones, la relación entre “El Chapo” Guzmán y su familia sigue siendo objeto de atención mediática, especialmente en lo que respecta al acceso de sus hijas a la prisión. Emali Guadalupe y María Joaquina, nacidas en 2011, representan un vínculo emocional importante para el narcotraficante, quien ha luchado por mantener contacto con ellas incluso desde tras las rejas.
La situación plantea interrogantes sobre los límites del sistema penitenciario estadounidense y sus implicaciones en las relaciones familiares de los reclusos de alto perfil como Joaquín “El Chapo” Guzmán.
