Europol ha identificado 821 redes de delincuencia organizada “muy amenazantes” en la Unión Europea (UE), muchas de las cuales operan en España, según un informe presentado en Bruselas.
Este informe es el primero en analizar en profundidad los detalles que hacen que estas organizaciones sean tan peligrosas.
Las redes criminales identificadas son diversas en cuanto a composición, estructura, actividad criminal, control territorial, duración en el tiempo, tipos de cooperación y otras dimensiones. Sin embargo, comparten características que las convierten en especialmente “amenazantes”, como su infiltración en el sistema legal, su agilidad para infiltrarse extensamente y su capacidad para perdurar en el tiempo.
Más del 80% de estas redes criminales hacen un uso indebido de estructuras empresariales legales para sus actividades delictivas, infiltrándose en sectores como la construcción, la hostelería y la logística. También se dedican a actividades como el tráfico de drogas, el fraude, los delitos relacionados con la propiedad y el tráfico de personas, entre otros.
El blanqueo de dinero es una actividad común entre estas redes, utilizando principalmente el sector inmobiliario, inversiones en bienes de alto valor, negocios con uso intensivo de efectivo y criptomonedas.
Aunque no todas las redes utilizan violencia y corrupción, hacerlo aumenta su nivel de amenaza. La mayoría de estas redes están organizadas jerárquicamente, y aunque a menudo tienen un liderazgo fuerte, este puede ser reemplazable y continuar después de una condena.
Europol destaca la importancia de examinar las actividades de apoyo y subsidiarias de estas redes, así como la necesidad de cooperación internacional e interregional para combatirlas eficazmente.
En resumen, este informe proporciona una visión detallada de las redes de delincuencia organizada más amenazantes en la UE, destacando sus características, actividades y la necesidad de abordarlas de manera integral y cooperativa a nivel internacional.