Una intensa búsqueda marcó los últimos días en la vida de Ana Victoria Ávila, la joven fotógrafa argentina conocida afectuosamente como “Nani”. Desde su repentina desaparición, familiares y amigos emprendieron una búsqueda incansable, que culminó en un desgarrador hallazgo: su cuerpo sin vida, flotando en el Mar Caribe.
“Fue un accidente”, afirmó Tamara Combina, amiga cercana de la víctima, quien lideró la campaña para encontrarla. Los restos de Ávila fueron descubiertos en las aguas cercanas a Playa del Carmen, donde residía y trabajaba. La trágica noticia sumió a sus seres queridos en una profunda consternación, reflejada en el emotivo pedido de la familia por preservar la memoria de “Nani” con respeto y dignidad.
Aunque las circunstancias exactas de su muerte aún no están esclarecidas, las autoridades manejan la hipótesis de un posible ahogamiento. La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo está a cargo de la investigación, mientras que los familiares de la joven se preparan para viajar a México en busca de respuestas y para despedirse de ella en un emotivo adiós.
Ana Victoria Ávila, apasionada viajera y comprometida fotógrafa, dejó un legado imborrable. Su perfil público en redes sociales refleja su amor por los viajes y su apoyo a diversas causas sociales. Su partida deja un vacío irreparable en la vida de quienes la conocieron y amaron.
Según sus amigos, Ana Victoria era una persona excepcional, con una creatividad admirable y una determinación que la destacaba en todos los aspectos de su vida. Su recuerdo perdurará como el de una amiga inolvidable, una profesional talentosa y una fuente constante de inspiración para quienes compartieron su camino.