Luego de cumplirse los trámites legales correspondientes, se confirma que Dani Alves saldrá en libertad provisional tras abonar una fianza de un millón de euros.
El exfutbolista brasileño, reconocido por su paso por clubes como Barcelona, PSG y Juventus, ha sido sentenciado a 4 años y 6 meses de prisión por el tribunal de la Sección 21ª de la Audiencia de Barcelona, en relación a un caso de agresión sexual ocurrido el 22 de febrero pasado.
La defensa de Alves presentó una solicitud ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña para analizar la posibilidad de su liberación provisional mientras se resuelve la firmeza de la condena por el incidente ocurrido en la discoteca Sutton la madrugada del 31 de diciembre de 2022.
¿Qué condiciones se establecen para la liberación de Alves?
Primordialmente, se requiere que Dani Alves abone una fianza de un millón de euros como condición ineludible para su salida de prisión. Además, ante la preocupación por un eventual riesgo de fuga, los magistrados han impuesto medidas cautelares adicionales para garantizar su permanencia en España durante el proceso legal en curso, atendiendo los recursos presentados por todas las partes involucradas, incluyendo la Fiscalía, la acusación y la defensa.
En caso de que Alves cumpla con el pago de la fianza y recupere su libertad, se ha ordenado la confiscación de sus pasaportes español y brasileño, junto con la prohibición de abandonar el territorio ibérico. Asimismo, se le requerirá presentarse semanalmente ante la Audiencia de Barcelona, mientras que se le prohíbe acercarse a menos de un kilómetro de la víctima o comunicarse con ella en cualquier forma.
¿Cuál era la sentencia original?
Además de la pena de prisión de 4 años y 6 meses por agresión sexual, se le impuso a Alves un período de 5 años de libertad vigilada tras su liberación. También se le ordenó indemnizar a la víctima con 150 mil euros, pagar una multa de 9 mil euros por delito leve de lesiones, y se le prohibió cualquier tipo de comunicación con la denunciante, así como mantenerse a una distancia mínima de mil metros de ella.
Aunado a esta situación, otros casos similares en el ámbito deportivo han generado gran interés público y una demanda de justicia más rigurosa, como lo demuestra el pedido de 20 años de cárcel para Sebastián Sosa y otros jugadores por presunto abuso sexual.
Es relevante subrayar que el proceso legal sigue su curso y cualquier modificación o desarrollo en el caso será objeto de atención y análisis por parte de la opinión pública.