El canciller alemán, Olaf Scholz, se reunió en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, para urgir un alto al fuego duradero en Gaza y la entrada de más ayuda humanitaria en la región.
Durante la reunión, Scholz expresó su preocupación por el alto número de muertos civiles tras más de cinco meses de guerra en Gaza y cuestionó la justificación de los costos humanos en el conflicto.
Scholz también manifestó su oposición a una posible invasión terrestre de Rafah, último refugio seguro en la Franja de Gaza, y pidió a Netanyahu una mayor flexibilidad para lograr un acuerdo que libere a los rehenes en manos de Hamás. Netanyahu, por su parte, enfatizó que Israel no aceptará ningún acuerdo de paz que debilite su capacidad de defensa frente a vecinos hostiles y rechazó cualquier propuesta que ponga en riesgo la seguridad del país.