Las acciones de Tesla Inc están en camino de experimentar una pérdida significativa de US$76.000 millones en capitalización de mercado en tan solo dos días. Esta situación ha sido desencadenada por titulares desfavorables provenientes de China y Alemania, avivando las preocupaciones acerca de la dirección de crecimiento de la empresa.
En febrero, los envíos desde la fábrica de Tesla en Shanghái registraron su nivel más bajo en más de un año, provocando una caída del 5,6% en las acciones el martes, tras cerrar con una pérdida del 7,2% el día anterior. La situación empeoró con una perspectiva negativa para las entregas de Nio Inc. y una interrupción en la producción de la fábrica alemana de Tesla debido a un incendio presuntamente causado por una torre de alta tensión cercana. Además, al menos un analista redujo sus estimaciones de entrega para el primer trimestre basándose en datos de once países europeos y actualizaciones de China.
El analista Matthew Portillo de Tudor, Pickering, Holt & Co. expresó su preocupación, indicando: “No nos sorprendería que las estimaciones comenzaran a revisarse a la baja de cara a los resultados si los datos globales continúan confirmando el lento comienzo que hemos visto en los primeros dos meses de 2024”. Portillo ahora proyecta que las entregas totales para los primeros tres meses del año rondarán las 466.700 unidades, en comparación con las expectativas promedio de los analistas de alrededor de 474.200 unidades.
A pesar de las expectativas de desaceleración en la demanda este año, el panorama para los autos eléctricos ha sido desalentador últimamente. Las perspectivas para 2024 de Tesla fueron sombrías, seguidas de advertencias similares tanto de fabricantes de automóviles tradicionales como de nuevos competidores. Incluso, Apple Inc. canceló recientemente su proyecto de construir un vehículo eléctrico tras una década de esfuerzos.
La acción de Tesla, siendo la más costosa entre las “Siete Magníficas”, se enfrenta a la posibilidad de caídas adicionales mientras los inversionistas dirigen su atención hacia las empresas de inteligencia artificial. A pesar de ocupar el último lugar en términos de caídas porcentuales en el índice de Bloomberg para el año, la acción se cotiza a 58 veces sus ganancias futuras, mientras que Nvidia Corp., líder en inteligencia artificial, se cotiza a 34 veces.