El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), sopesa su participación en la próxima Cumbre de Líderes de América del Norte, cuestionando la perspectiva de un trato respetuoso por parte de algunos actores involucrados en el evento. En un comunicado enérgico, AMLO declaró: “Si no hay un trato respetuoso, no participo”, a pesar de destacar su buena relación con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.
AMLO, en un llamado a la comprensión de la situación que enfrenta México, abordó las campañas de desinformación que buscan desacreditar su administración durante una profunda transformación en el país. “Durante décadas, un grupo se sintió dueño de nuestro país y nos condujo hacia la decadencia. Ahora, quieren regresar al poder. Utilizan su riqueza para influir en todo”, expresó el presidente.
En un gesto diplomático, el líder mexicano instó al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y al primer ministro Trudeau, a familiarizarse con la campaña difamatoria que lo señala como “narco presidente”, destacando la inmoralidad de participar en una guerra sucia. AMLO recordó el trato respetuoso que su gobierno ha mantenido con las autoridades de Canadá y Estados Unidos y reafirmó la legitimidad de las autoridades mexicanas, elegidas sin fraudes electorales.
Advirtiendo sobre las posibles repercusiones en las relaciones internacionales, AMLO concluyó: “Un jefe de Estado tiene tantas responsabilidades que, a veces, sus círculos más cercanos o lejanos toman decisiones que repercuten en la diplomacia y la confianza entre naciones”.
La eventual ausencia de AMLO en la cumbre plantea preocupaciones sobre el impacto en la cooperación regional y la agenda conjunta de los tres países, especialmente ante la solicitud de Estados Unidos de mayor transparencia en las importaciones de acero y aluminio de terceros países.