Los trabajadores de la Torre Eiffel en París han decidido emprender una huelga en respuesta a lo que consideran una gestión financiera deficiente del emblemático monumento parisino.
Un letrero en inglés en la entrada del monumento informa a los visitantes: “Debido a una huelga, la Torre Eiffel está cerrada. Les pedimos disculpas”. La cantidad de turistas en el popular sitio turístico de 300 metros de altura ha aumentado, especialmente con la proximidad de los Juegos Olímpicos de verano en la capital francesa.
En el sitio web de la Torre, se encuentran avisos en varios idiomas advirtiendo sobre la interrupción de servicios. Se insta a los visitantes a verificar el sitio web para obtener actualizaciones sobre la situación antes de planificar su visita. Aquellos que ya hayan comprado boletos recibieron avisos por correo electrónico.
Aunque la Torre Eiffel suele estar abierta los 365 días del año, ocasionalmente se ve afectada por huelgas. La decisión de cerrarla en esta ocasión ha generado descontento entre los visitantes, pero algunos comprenden y respaldan las demandas laborales.
Stephane Dieu, del sindicato CGT, que representa a un gran número de empleados de la Torre Eiffel, explicó que la huelga busca aumentos salariales proporcionales a las ganancias por ventas de boletos y mejoras en el mantenimiento del monumento, propiedad de la municipalidad de París.
La protesta destaca preocupaciones sindicales sobre el esquema financiero de la Torre Eiffel, acusando la priorización de beneficios a corto plazo en detrimento de la preservación a largo plazo del monumento y el bienestar de la compañía. La huelga resalta la necesidad de revisar y mejorar las condiciones laborales y financieras para garantizar la sostenibilidad y el cuidado a largo plazo del emblemático monumento parisino.