México, 4 de enero de 2021.- Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado, declaró que a diferencia de otros países que implementaron medidas coercitivas para asegurar que el confinamiento fuera respetado durante la emergencia sanitaria, el gobierno de México apeló a la responsabilidad social de sus habitantes.
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) destacó que se permitió que cada persona, desde su realidad y haciendo uso de su libertad, tomara decisiones que, por un lado, protegieran su vida y la de las personas a su alrededor y que, por otro, les permitieran seguir obteniendo los recursos necesarios para subsistir.
Todo esto acompañado de un esquema de apoyo para los sectores más vulnerables de la población.
Dijo que lejos de que la emergencia sanitaria difuminara las metas de la transformación en México, se demostró la necesidad de transitar a un esquema en que el Estado proteja la libertad, incluso, contra los intereses del mercado.
En el texto “Lecciones de la pandemia II”, Monreal Ávila hizo una reflexión sobre los efectos del confinamiento en la libertad de las personas, así como de las decisiones del gobierno mexicano y los retos para 2021.
Recordó que hace dos años se dio un golpe de timón en el cambio de modelo político, económico y social, donde uno de los ejes principales fue asegurar que cada persona viva con libertad y que sus derechos sean respetados.
Todo esto, asentó Monreal Ávila, acompañado de un esquema de apoyo para los sectores más vulnerables de la población.
Sin embargo, reconoció que la lección más relevante que la emergencia sanitaria ha dejado es que no todas las personas tienen la posibilidad (la libertad) de decidir, pues solamente una capa de la población de México y otras regiones del mundo tuvo la oportunidad de elegir si acataría el confinamiento y las medidas de sana distancia, mientras trabajaba de manera remota desde su hogar.
Subrayó que la gran mayoría no contó con la opción de tomar esta decisión, pues estaba en juego su subsistencia.
Opinó que esta situación se debe a que, durante al menos las últimas cuatro décadas, el mundo estuvo expuesto a un modelo económico que privilegió al mercado.
Las consecuencias de ese tipo de esquemas han sido evidenciadas por la crisis sanitaria, ya que los Estados de bienestar, incluso los de las economías consideradas como desarrolladas, fueron incapaces de brindar seguridad social y proteger la vida y la salud de sus sociedades.
Monreal Ávila consideró que otra enseñanza relevante es reconocer que millones de personas han vivido durante décadas bajo un esquema que ha limitado sus posibilidades y, por consiguiente, su libertad, al estar atadas a las consecuencias de un modelo económico diseñado para beneficio de muy poca gente.
“Se trata de una lección que no debe ser tomada a la ligera, pues de su reconocimiento y de la capacidad que los gobiernos tengan para proponer e implementar un modelo que amplíe las libertades dependerá el éxito que cada sociedad alcance en el futuro”, señaló.
Dijo que cada mujer y hombre entienden y viven la libertad de diferente manera.
Los planes, acciones, actos y, por tanto, la libertad de algunas personas se vieron restringidos a causa del confinamiento.
Derivado de ello, la pandemia nos deja otra lección: atesorar la convivencia diaria y la capacidad de desarrollarnos con plenitud.